Después de la brutal patada durante el partido de ida, Lionel Messi jugó la revancha ante Nashville, cumplió y salió reemplazado por una molestia en el posterior de la pierna derecha. En la primera parte, fue fundamental en la apertura del marcador y lo amplió con un tanto de su autoría para que el Inter Miami siga avanzando en la la denominada Concachampions, la Copa de Campeones de la Concacaf.
Si todo va bien en cuanto al físico, el próximo lunes Messi viajará a la ciudad de Philadelphia, dónde la Selección Argentina enfrentará en un amistoso ante El Salvador. Será en ese primer entrenamiento en el que el cuerpo médico de AFA evalúe al futbolista. Se descuenta que la Pulga no viajará el próximo sábado a Washington, donde las Garzas enfrentarán al DC United, por su quinto partido en la MLS.
Apenas 20 minutos. Veinte y monedas pasaron para que Messi vuelva a ser una pieza clave en el camino que el equipo que comanda Tata Martíno transita con el objetivo de meterse en el próximo Mundial de Clubes, a través de la Copa de Campeones de la Concacaf. El escollo que significaba Nashville se desactivó así de rápido en la revancha de la serie que empezó con 2-2 en la ida.
A los ocho minutos fue la llave para la apertura del marcador con una asistencia a pura precisión para Luis Suárez. Una jugada de memoria: el rosarino recibió desde la izquierda, controló y tocó con fuerza justa para el uruguayo que ya corría para ganarle a la carrera al defensor y definir frente al arco con un sutil toque entre las piernas del arquero. De esa manera, el equipo del Tata Martino comenzó a tallar la clasificación ante sus hinchas en el estadio Chase.
Fue el propio Messi quien amplió la ventaja. A los 23 minutos comandó una jugada en el mediocampo, soltó y fue a buscar la definición por el centro. La combinación se ensució en el camino, pero Las Garzas recuperaron la posesión gracias al juvenil paraguayo Diego Gómez, que se metió en el área y tocó para el capitán que, pese a que le quedó atrás, la paró y definió sin problemas.
El tanto confirma el mejor mes del año, o al menos el más productivo, para el campeón del mundo: de los 826 goles de su carrera, 106 fueron en marzo. Ya en cuartos de final, ahora Inter Miami se enfrentará con el ganador de Monterrey – Cincinnati, que tuvo como ganador al equipo mexicano en el partido de ida por 1 a 0. El ganador de la competencia, se clasificará al próximo Mundial de Clubes.
Poco antes de que culminara la primera parte, Messi se acercó al banco mientras Martino daba indicaciones acaloradas tras una mala resolución en ataque. Leo no había participado y buscó al entrenador para decirle algo. Tras la finalización, corrió al vestuario sin esperar a los compañeros.
Minutos después salió con sus compañeros para jugar la segunda parte y apenas cuatro minutos después se fue reemplazado por Robert Taylor, quien -tras una asistencia de Suárez- metió de cabeza el tercero para asegurar la clasificación del Inter Miami, ya sin el mejor el mejor en la cancha. Nashville descontó en tiempo de descuento, pero el tanto de Sam Surridge no hizo la diferencia en el global que terminó 5 a 3.
Mientras estuvo en cancha, fueron casi 50 minutos, no se privó de nada: hizo 36 toques y 24 de sus 27 pases -el 89 por ciento- fueron precisos; registró un quite, ganó tres de los cuatro mano a mano que disputó y además del gol y la asistencia, generó una gran chance que no fue aprovechada.
Estadísticas aparte, lo que verdaderamente le interesa al entrenador de la Argentina, Lionel Scaloni, es que Messi llegue sin problemas para los amistosos que se avecinan, los útlimos antes de la lista definitiva para defender el título de la Copa América.