El próximo 24 de febrero la plataforma de impronta argentina conocida como TARINGA! dejará de estar en línea debido al “cambio de tendencias de los últimos años respecto a las redes sociales”, según manifestó la compañía en su perfil. Si bien no detallaron cuáles serán los próximos pasos a seguir, animaron a su público informando que pronto darán a conocer “todo lo que necesitan saber”.
Con un sentido mensaje, la red social que llegó a convertirse en la segunda más utilizada del país, incluso en América Latina, marcó su fin manifestando que “20 años de historia no es un logro del que cualquier sitio, plataforma o comunidad pueda presumir, ni de lejos”.
Tal como sus creadores lo indicaron, este espacio virtual “ha sido el lugar de fantásticas historias, memes, trolleadas, inteligencia colectiva por doquier”, que permitía a los usuarios estar conectados pero sobre todo tener “libertad de expresión”.
«Podrán llamarnos virgos, ácidos, insoportables, antisociales y todo lo que quieran. Pero hemos hecho historia y eso nadie nos lo podrá negar jamás«, remarcaron en el mensaje que deja entrever el mal sabor que genera “las condiciones del mercado y la competitividad de las redes sociales”. “Este sueño se ha frustrado”, lamentaron, tras el esfuerzo y dedicación que desde la compañía llevaron a cabo.
Me da tristeza el cierre de Taringa! Desde hace un tiempo yo ya no soy parte, pero cuando miro hacia atrás me llena de orgullo todo lo que Taringa! logró.
Estoy muy orgulloso de que gracias a Taringa! millones de personas pudieron tener por primera vez una lugar para expresar… pic.twitter.com/s3VXFvYvX3
— Matias Botbol (@gangachanga) March 12, 2024
Lo que representaba Taringa!
Muchos han sentido hablar de Taringa!, y esto se debe a que fue una de las primeras Web 2.0 en español creada en 2004, con un objetivo claro que pregonaba el sentido de comunidad a través de su lema «Inteligencia Colectiva».
El sitio te invitaba a ser parte de su comunidad otorgando la libertad de compartir contenido, opiniones, intereses, experiencias, con el resto de los usuarios, a través de posts.
En 2015 la red social que había estado liderando los primeros puestos de sitios más visitados según comScore, empezó a mostrar una baja gradual. Los resultados se vieron reflejados en el número de visitas, lo que provocó que del puesto 500 en 2017 pasara al 1150 en 2018.
En 2019, cuando los números no eran favorables, fue adquirida por la compañía especializada en blockchain IOV Labs, lo que significó un nuevo rumbo y una decisión de actualizarse, pero sin perder la esencia que ya tenía Taringa!, que en un principio se escribía con minúscula y tras el cambio pasó a la mayúscula.
Manteniéndose siempre a la orden de lo que la tecnología demandaba, a mediados de 2023 lanzaron una app móvil para reconquistar a los usuarios más nostálgicos y seducir a las nuevas generaciones, reconociendo a su vez el gran aporte que hacían los creadores de contenido de calidad que “interactúan dentro de una red social”.
“La única manera de hacer disrupción no es intentando hacer lo mismo, sino innovando con un modelo de negocio completamente diferente. No seremos un jugador más”, señalaba en ese entonces la directora ejecutiva Cristina Sancho, al decidir tomar un nuevo camino para la plataforma.
A pesar de los intentos no pudo sostenerse mucho más y finalmente la compañía anunció este martes el cierre tras permanecer dos décadas en línea.
MSA / ED