lunes, 25 noviembre, 2024
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Enzo Fernández, de enemigo número 1 a capitán de Chelsea: la jugada de Maresca, el DT ajedrecista que eligió la mejor movida

“Un entrenador sólo puede beneficiarse de adquirir la mente de un buen ajedrecista. Llegué a la conclusión de que jugar al ajedrez puede entrenar la mente de un entrenador. El elemento fundamental del ajedrez es la lógica que lleva a un jugador a comprender y, por lo tanto, predecir los movimientos de los oponentes», escribió Enzo Maresca en su tesis para obtener su diploma como entrenador en la escuela Coverciano, según cuenta The Athletic, el sitio deportivo que alimenta a The New York Times, en una muy interesante nota que habla del vínculo del DT italiano de Chelsea -y de Pep Guardiola y Mo Salah- con el deporte ciencia y su aplicación en el fútbol.

¿A qué viene esto? En que Maresca, que es dueño de una interesante carrera como futbolista y promete tener una aún más relevante trayectoria como técnico luego de haber sido colaborador del mismísimo Guardiola, debe haber pensando una y mil veces qué hacer con Enzo Fernández luego del desafortunado episodio que lo tuvo como protagonista en plenos festejos de la Selección Argentina por el bicampeonato de la Copa América.

Se resume, por las dudas. El ex River transmitía un vivo por Instagram en el momento justo en que los jugadores de la Scaloneta entonaban una canción de cancha con contenido racista, homofóbico y xenófobo en contra de Francia, el nuevo clásico de la Selección Argentina. Apenas se dio cuenta, el mediocampista apagó el celular. Pero ya era tarde. El exabrupto, un papelón condenable por donde se lo mirara y en el que no sólo estuvo involucrado el mediocampista, se viralizó en las redes sociales y explotó con fuerza en París y en Londres.

Primero la Federación Francesa de Fútbol presentó una demanda ante la FIFA por cánticos «racistas y discriminatorios» en un caso que todavía no tuvo resolución oficial. La situación se agravó cuando estalló en el vestuario de Stamford Bridge. Wesley Fofana, de padres marfileños y compañero de Fernández en el Chelsea desde hace dos años, lo escrachó en redes y lo señaló como responsable de que el «racismo desinhibido» se propague en el fútbol.

El defensor nacido en Marsella no fue el único que reaccionó. Fueron diez los compañeros de Enzo en Chelsea que dejaron de seguirlo en sus redes sociales. A Fofana se sumaron los franceses Benoit Badiashile, Christopher Nkunku (de ascendencia congoleña), Axel Disasi, Malo Gusto (madre martiniquinesa), Lesley Ugochukwu (padres nigerianos), Malang Sarr (de origen senegalés). El marfilense David Datro Fofana, el belga Romero Lavia y el albano Armando Broja también acompañaron la movida de los galos.

Todo sucedió después de que Fernández, quien sólo recibió el solitario apoyo del senegalés Nicolas Jackson, hiciera un mea culpa. «La canción incluye un lenguaje muy ofensivo y no hay absolutamente ninguna excusa para estas palabras. Me opongo a la discriminación en todas sus formas y me disculpo por quedar atrapado en la euforia de nuestras celebraciones de la Copa América. Ese vídeo, ese momento, esas palabras, no reflejan mis creencias ni mi carácter», escribió Enzo en sus redes sociales para intentar apagar el incendio.

Enzo Fernández recibe indicaciones de Enzo Maresca. Foto: ReutersEnzo Fernández recibe indicaciones de Enzo Maresca. Foto: Reuters

Su ofrecimiento de disculpas, sincero y con las palabras justas, no evitó que Chelsea le abriera un expediente disciplinario. Parecía que nada alcanzaría para salvarle el pescuezo a Fernández. Y más todavía después del efecto rebote que se vivió en los Juegos Olímpicos de París 2024, con silbatinas y abucheos masivos de los franceses a los equipos argentinos cada vez que sonaba el himno nacional en una competencia.

A partir de ahí, Enzo hizo todo bien. Al volver a los entrenamientos con su club les pidió perdón cara a cara sus compañeros. El mismísimo Fofana, el que le había salido con los tapones de punta, le estrechó un abrazo. “Él dijo que lo sentía. No quería hacer daño a los aficionados franceses ni a nadie. No entendió al cantarlo. Y confío en él. Porque lo conozco. Conozco a Enzo. No es racista. Estoy contento por su vuelta. Jugamos juntos y necesitamos estar juntos. Está todo bien ahora», sostuvo el francés sobre el argentino, quien además decidió hacer una donación a una entidad benéfica que lucha contra la discriminación como parte de su arrepentimiento por lo sucedido.

Y ahí es donde aparece la mano de Maresca. «No creo que sea racista, para ser honesto. Al final, son todos seres humanos, no hubo malas intenciones de parte de ninguno de ellos. Por eso no creo que cuando Enzo vuelva vaya a haber algún problema. Como dije, los jugadores ya aclararon la situación, el club hizo lo mismo, por eso no hay nada que agregar, y pienso que no son malas personas y son seres humanos. No creo que haya ningún problema. Hablé con Enzo, hablé con todos y como dije, el jugador hizo una declaración, pidió perdón, y con eso es suficientemente claro”, resumió el DT.

Enzo Fernández y Wesley Fofana. Foto: AFPEnzo Fernández y Wesley Fofana. Foto: AFP

Así, lejos de quedar atrapado en un zugzwang -término ajedrecístico que explica que cualquier movimento sobre el tablero empeorará la posición del jugador-, el entrenador italiano eligió revalorizar a Enzo Fernández. Y le volvió a dar la cinta de capitán, ahora en un partido oficial -ya lo había sido contra Inter en un amistosos-. Maresca, como buen ajedrecista que duce ser, entendió que era la mejor jugada. El vestuario avaló su decisión. Fernández, al aceptar su error, demostró uno de los tantos requisitos necesarios para ejercer un buen liderazgo. Ahora es tiempo de construcción en el campo de juego. El tiempo les dará (o no) la razón.

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