La polémica en la que quedó inmerso el Senado tras la expulsión de Edgardo Kueider podría entrar en un impasse hasta febrero, cuando se realizará la sesión preparatoria para renovar las autoridades de la Cámara, dado que allí empezaría a resolverse el reemplazo del entrerriano por la camporista Stefanía Cora si es que el presidente Javier Milei no convoca a sesiones extraordinarias antes.
Fuentes de las dos cámaras del Congreso confirmaron a iProfesional que por ahora no tienen «nada de nada» sobre las extraordinarias que el Ejecutivo prometió varias veces. Se especula con que si el Gobierno alcanza algún acuerdo para avanzar con temas como la eliminación de las PASO podría convocarlas para febrero, pero casi nadie hoy lo considera posible.
En el Senado algunos lo festejan porque les daría algo de tiempo para descomprimir. «No se ven sesiones en el horizonte y puede ser que recién se reactive todo en la preparatoria», indicó una fuente de la Cámara alta, en referencia a la sesión que por reglamento se hace el 24 de febrero de cada año.
Sin embargo, también entienden que la tensión podría volver a escalar cuando se acerque esa fecha no solo porque el kirchnerismo presionaría para que asuma Cora en el lugar del que fue expulsado Kueider tras su detención en Paraguay con 200 mil dólares en efectivo sin declarar, sino porque la disputa de la Casa Rosada con la vicepresidenta Victoria Villarruel podría tener un nuevo capítulo.
Y es que entre las autoridades que se tienen que definir en esa sesión figura el presidente provisional del Senado que secunda a la vicepresidenta de la Nación en el recinto y es el segundo peldaño en la línea de sucesión. En la Cámara alta no descartan que pueda haber cortocircuitos por ese cargo clave.
Stefanía Cora se prepara para reemplazar a Edgardo Kueider en el Senado: ¿cuándo asumirá?
Stefanía Cora fue la candidata suplente de Kueider en la lista del Frente de Todos en 2019 y es quien deberá completar su mandato hasta diciembre de 2025 tras haber sido expulsado por una mayoría de dos tercios del Senado. Actualmente, es diputada provincial y una de las principales dirigentes de La Cámpora en Entre Ríos.
No obstante, para que un senador suplente asuma es necesario que se lleve a cabo una sesión y si el Gobierno no convoca a sesiones extraordinarias antes, lo más probable es que la jura se realice en la sesión preparatoria. Lo único que podría demorarlo es que prospere el amparo judicial que presentó Kueider para dejar sin efecto aquella sesión del pasado 12 de diciembre y ser reincorporado hasta que la Justicia resuelva su situación.
De hecho, fuentes del oficialismo deslizaron a iProfesional que la discusión en torno a la validez de aquella sesión -objetada no solo por Kueider sino también por el propio Milei con el argumento de que Villarruel debía estar a cargo del Ejecutivo y no del Senado en ese momento- podría servirles de excusa para no dar quórum y demorar la jura. El Gobierno no quiere que el kirchnerismo sume una banca más a las 33 que ya tiene y quede más cerca de la mayoría.
Pero Unión por la Patria presionará para que Cora asuma en la primera sesión que se paute, sea en extraordinarias o en la preparatoria. Una señal de eso es que, a pesar de que todavía no juró en su banca, la biografía de la dirigente kirchnerista en Wikipedia ya la presenta como «actual senadora nacional desde el 12 de diciembre de 2024».
La sesión preparatoria y un cargo clave: ¿nueva pulseada entre Javier Milei y Victoria Villarruel?
La controversia por la sesión en la que se impuso la iniciativa del kirchnerismo para echar -y no suspender- a Kueider volvió a elevar la tensión entre Milei y Villarruel, quien estos días publicó un mensaje para dejar clara su lealtad al Presidente y para tratar de bajar el tono de los ataques que le dirige la Casa Rosada.
En la Cámara alta algunos temen que la sesión preparatoria se convierta en un nuevo foco de la pelea porque, entre las autoridades a definir, está la presidencia provisional que hoy ocupa el libertario Bartolomé Abdala. El senador puntano se muestra equilibrado en la interna, pero por el puesto que le toca y cuestiones de trabajo cotidiano está más asociado a Villarruel.
En el Senado hay rumores de todo tipo sobre la posibilidad de que la Casa Rosada quiera ubicar a otra persona allí para dejar más aislada a la vice. Uno de los que se menciona es el actual jefe del bloque oficialista, Ezequiel Atauche, aunque en su despacho niegan que tenga la intención de reemplazar a Abdala.
Otras fuentes del oficialismo subrayan que «solo son rumores» e indican que «la idea es que seguir como hasta ahora», aunque reconocen que si aparece un pedido del Ejecutivo podría cambiar eso». De esta forma, nadie se anima a descartar que el Gobierno quiera mover fichas en el Senado para marcarle aún más la cancha a la vicepresidenta.
Versiones y danza de nombres en un Senado caldeado
Sin embargo, los rumores y la desconfianza que reina en el Senado desde la expulsión de Kueider salpican en todas las direcciones y echan a correr otros nombres. Por caso, en el oficialismo desconfían de las intenciones de Luis Juez, el presidente del bloque PRO que votó por expulsar al entrerriano a pesar de que había dicho que apoyaría su suspensión.
Esa estrategia apuntaba a evitar que el kirchnerismo sumara una banca y, luego de la sesión, en varios despachos del oficialismo responsabilizaron a Juez por su fracaso. El cordobés incluso fue a contramano de la directiva que bajó la cúpula del partido liderado por Mauricio Macri.
Todos en el Senado saben que Juez tiene muy buena relación con Milei. Él mismo lo reconoció días atrás. Cerca de Villarruel sospechan que quiere congraciarse con el Presidente para «ir por el lugar de Abdala» en la preparatoria y más adelante ser un referente para él en Córdoba, según supo iProfesional.
En otras oficinas del Senado miran, en cambio, al salteño Juan Carlos Romero, figura estelar del interbloque Provincias Unidas que también integraba Kueider y que se convirtió en un espacio aliado del oficialismo. El experimentado senador (está desde 2007) se destaca por su marcado anti kirchnerismo, pero a los gobernadores peronistas no les desagrada su figura.
Y es que tanto para ratificar a las autoridades actuales del Senado como para reemplazarlas hace falta la aprobación de todo el cuerpo por mayoría simple. De allí que la preparatoria sea vista desde ahora como un día clave en una Cámara donde el oficialismo está en franca minoría, el kirchnerismo a pocos pasos del quórum y el resto de la oposición fragmentada.
En cualquier caso, la polémica que se desató en el Senado tras la expulsión de Edgardo Kueider promete continuar. La Cámara tendrá que definir en algún momento la jura de su reemplazo y si Javier Milei no llama a extraordinarias antes todo apunta a la sesión preparatoria de febrero como el desenlace de las disputas como la que involucra a Victoria Villarruel, entre otras que, más públicas o más reservadas, continúan pese al receso legislativo.