Más de 12 horas estuvo Ariel García Furfaro (49), el dueño de HLB Pharma, en el palacio de los Tribunales Federales de La Plata y no pudo sentarse frente al juez Ernesto Kreplak para su indagatoria. Es que el resto de los detenidos en la causa por el fentanilo contamina declararon desde el mediodía hasta casi entrada la noche y el trámite se demoró.
El dueño del grupo empresario apuntado por la adulteración de este medicamento, el cual provocó la muerte de al menos 96 pacientes internados en distintos puntos del país, se presentará nuevamente este viernes para completar la indagatoria.
Desde temprano, cuando apenas había asomado el sol, comenzaron a llegar a la alcaidía de los Tribunales Federales de La Plata los 10 detenidos por el caso del fentanilo contaminado, entre ellos, Diego y Hernán García Furfaro, hermanos de Ariel.
Estos dos acusados declararon ante el juez Kreplak y negaron tener conocimiento de que había fallas en el proceso de producción. «No sé cómo fue que pasó todo esto», dijo uno de ellos, según confiaron a Clarín fuentes del caso.
Sin embargo, la Justicia habría obtenido elementos para sospechar que los empresarios (y algunos de los responsables técnicos de la empresa) tenían conocimiento de las fallas y, no obstante, habrían decidido vender la producción.
Los investigadores tendrían mensajes en los celulares secuestrados en los procedimientos que constatarían esa hipótesis.
Según pudo confirmar Clarín, después del procedimiento quedaron en libertad Nilda Furfaro, madre de los hermanos que manejaban HLB y a la que le dieron arresto domiciliario por su edad- y uno de los técnicos sospechados de la maniobra.
Durante las indagatorias, el juez notificó a todos de que les imputa haber vulnerado los artículos del Código Penal que reprime al que «adulterare o envenenare aguas potables, sustancias alimenticias o medicinales cuando de eso resultare la muerte de alguna persona». Es un delito que prevé condenas de entre 10 y 25 años.
Es por los 12 casos que confirmó el Cuerpo Médico Forense (CMF) de la Suprema Corte y que consideraron los fiscales para pedir las detenciones. Pero podría haber más. Además, la fiscalía tiene acreditado «fallas gravísimas en el proceso productivo de los laboratorios HLB Pharma y Ramallo», por lo que también están involucrados directores técnicos, directivos y accionistas de esas firmas.
Quienes declararon
Este jueves fueron indagados por el juez Kreplak Nilda Furfaro, Damián García Furfaro, Diego García Furfaro, José Antonio Maiorano, Horacio Antonio Tallarico, Rodolfo Antonio Labrusciano, Carolina Ansaldi, Víctor Boccaccio y Javier Tchukran.
Según las versiones en tribunales, Boccaccio, ex director técnico del laboratorio, quedó en libertad luego de declarar.
Para los fiscales, «las graves falencias estructurales que se verificaron, en estos tres meses de investigación, en los procesos de producción del medicamento a partir de las distintas medidas probatorias practicadas -entre ellas, el reciente informe del prestigioso Instituto Malbrán- resultaron determinantes para que los lotes de fentanilo (N° 31.202 y 31.244) salieran al mercado».
El procedimiento jurídico se realiza en el tercer piso del edificio que la Justicia Federal de La Plata tiene en un recoleto palacio instalado en 8 y 50, en pleno centro de la capital bonaerense. Las celdas donde aguardan el turno para estar frente al juez tienen entrada por la calle 50.
Kreplak tendrá 10 días para resolver la situación procesal de los 10 principales sospechosos de esta tragedia sanitaria que hasta el momento registra 96 víctimas. También está prevista otra tanda de indagatorias para siete personas más. Esas audiencias fueron convocadas para el 25, 26, 27 y 28 de agosto. Y para el 1ro, 2 y 3 de septiembre.
En este grupo de futuros indagados están: María Victoria García (directora de Garantía de Calidad y mano derecha de los dueños), Eduardo Darchuk (jefe en Ampollas del laboratorio); Wilson Pons (ocupó un cargo de director técnico en las empresas), Dayana Astudillo Arzolidis (operaria de Ampollas); Edgardo Scwlafani (encargado de Soluciones de Grandes Volúmenes y todo lo relacionado con la dosificación de agua en los productos), Rocío del Cielo Garay (jefa de turnos de Ampollas) y Adriana Iúdica (directora de Microbiología).
La solicitud de detención que el miércoles a la noche ejecutó el juez Kreplak y terminó con García Furfaro entregándose ante la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), fue realizada por la fiscalía Federal Nº 1 de La Plata, a cargo de María Laura Roteta, y por el responsable de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), Diego Iglesias.
También tomó intervención en este proceso que comenzó hace hoy 100 días, la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA). Es decir, el Ministerio Público tiene elementos para suponer que algún organismo oficial actuó mal.
La decisión del juez Kreplak se conoció un día después que se recibiera el informe del Cuerpo Médico Forense de la Suprema Corte en el que establece que por lo menos en 12 de las historias clínicas de los pacientes afectados con el fentanilo contaminado hubo un «nexo concausal» entre la muerte de esas personas y la bacteria que contenían las ampollas que suministró HLB a los centros asistenciales.
Por otra parte, el Instituto Malbrán pudo comprobar con “certeza científica la identidad fenotípica, molecular y genómica, entre las muestras clínicas remitidas y las recuperadas del lote 31.202 de fentanilo HLB Pharma”. Es decir: que las bacterias con las que se habían contagiado los pacientes coinciden genéticamente en todo con las que contenían las ampollas que proveyó el laboratorio que pertenece a Ariel García Furfaro.
AS/AA