Eric Adams, el actual alcalde de Nueva York, ocupa una de las posiciones más influyentes de Estados Unidos. Además de ser el líder de la ciudad más grande del país, el mandatario supervisa más de 40 agencias municipales y tiene un impacto directo en la vida cotidiana de los 8,5 millones de habitantes de la Gran Manzana.
La remuneración de Adams refleja la responsabilidad y el alcance de sus funciones, con un salario anual que asciende a US$258.750. Este monto es el resultado de una estructura salarial establecida y accesible a través de fuentes de datos abiertos, como el sitio web del NYC Green Book, que ofrece información pública sobre los sueldos de funcionarios de la ciudad.
Este salario, antes de impuestos, se distribuye en pagos mensuales de aproximadamente US$21.562,50, lo que representa unos US$4975 semanales y unos US$708,90 diarios.
Estos montos están sujetos a las deducciones fiscales correspondientes, que varían según las circunstancias personales de cada funcionario, pero ofrecen una idea clara del monto bruto que Adams percibe por su trabajo al frente de la ciudad.
Como jefe del poder ejecutivo de la ciudad, el alcalde Adams tiene una serie de responsabilidades que abarcan desde la gestión de las relaciones con las entidades gubernamentales locales, estatales y federales, hasta el manejo de temas relacionados con el uso de la tierra y los contratos de la ciudad.
Según lo establecido en el NYC Green Book, el alcalde tiene la facultad de vetar leyes locales aprobadas por el Concejo Municipal, aunque este puede ser anulado por una votación de dos tercios. Además, Adams tiene la potestad de nombrar y destituir a los comisionados de las más de 40 agencias de la ciudad y de asignar miembros a diversas juntas y comisiones.
Dentro de las facultades del líder demócrata también está la supervisión de la economía y el desarrollo de infraestructuras de la ciudad, un papel crucial en el contexto de la recuperación económica de Nueva York, especialmente tras los efectos devastadores de la pandemia de COVID-19.
El alcalde Adams, como líder político y económico, debe liderar iniciativas que busquen reducir la desigualdad, mejorar la seguridad pública y fomentar el bienestar de todos los neoyorquinos.
Adams no solo maneja los aspectos gubernamentales, sino que también participa activamente en instituciones culturales y de educación en la ciudad. Como “ex officio”, el alcalde tiene derecho a ser miembro en los consejos de varias instituciones culturales de Nueva York, como el Museo de Arte Moderno (MoMa, por sus siglas en inglés), la Biblioteca Pública de Nueva York y el Lincoln Center, entre otras.
Estas son solo algunas de las entidades que forman parte del Grupo de Instituciones Culturales de la Ciudad de Nueva York, donde Adams ocupa un puesto en calidad de miembro honorario.
Eric Adams dedicó gran parte de su vida al servicio público. Su carrera comenzó en la Policía de Nueva York (NYPD, por sus siglas en inglés), donde se destacó por ser un defensor de la reforma y la lucha contra el racismo dentro de las fuerzas policiales, según cuentan en su biografía.
Antes de asumir la alcaldía, fue senador estatal y presidente del distrito de Brooklyn, donde trabajó para mejorar la calidad de vida de los residentes, al promover políticas de justicia social, reducción de la desigualdad y mejoras en la educación y la seguridad.
Según destaca el portal oficial de Nueva York, Adams creció en condiciones difíciles en Brownsville y South Jamaica, donde enfrentó la pobreza y la adversidad. Su historia lo motivó a luchar por los derechos civiles y a cambiar el sistema desde adentro.