En medio del flamante romance entre Roberto García Moritán y la modelo Priscila Crivocapich, algunas voces del medio comenzaron a opinar sobre ella… y no todas en buenos términos. Una de las más contundentes fue la panelista Caro Molinari, quien compartió una experiencia personal que no deja bien parada a la conductora.
“Yo trabajé el año pasado en el streaming de Telefe. La conocía, de antes, de la época del modelaje, aunque no teníamos trato. Pero no tuve una buena experiencia trabajando con ella”, reveló Molinari en Puro Show, el programa que se emite por El Trece.
La panelista relató que su llegada a un programa de deportes conducido por Priscila fue muy esperada por ella, ya que atravesaba un momento difícil en su vida personal. “Tenía muchas ganas de volver a trabajar. Al principio iba al streaming de Gran Hermano, la pasaba bárbaro: la Tora, Nacho, Mora, todos divinos».
Y siguió: «Iba una vez por semana, hasta que me ofrecieron este otro proyecto que conducía ella junto a dos periodistas más, que también eran muy buena onda”. Desde el comienzo, el ambiente fue hostil. “En la primera reunión de producción, había una mesa larga con los productores».
«Ella no me saludó. Me pareció raro, porque yo era la nueva”, recordó con incomodidad. Según Molinari, las discusiones y tensiones se hicieron moneda corriente. “Discutía con el productor por cosas del año anterior. Y cuando arrancó el programa, el clima era muy tirante, de pelea. Se notaba un mal ambiente”, aseguró.
Fernanda Iglesias, también presente en el panel, agregó que “los otros dos periodistas del panel la odian”, a lo que Molinari sumó una anécdota reveladora: “El primer día de trabajo, alguien de producción me dijo: ‘Esperemos que dures, porque la chica del año pasado duró un solo programa’. Era una psicóloga deportiva”.
Finalmente, Caro confesó que decidió renunciar. “Me costó mucho porque era un trabajo que anhelaba. Pero fue la primera vez que me pasó de dejar algo por una persona en particular”, admitió.
El periodista Pampito también aportó su información desde el detrás de escena del medio: “Un periodista muy querido me dijo que habla pestes de ella. Que es chupa medias con los jefes, mala, insegura, que no entiende los tiempos de conducción y que es traicionera”.
Molinari cerró con una imagen que sintetiza todo: “Era muy difícil trabajar al aire. A mí, por mi forma de ser, me pone nerviosa que se griten en medio del trabajo. Había portazos”.