El gobierno de Pakistán anunció formalmente su decisión de recomendar al presidente de Estados Unidos,Donald J. Trump, para el Premio Nobel de la Paz 2026, destacando su intervención diplomática decisiva y liderazgo durante la reciente escalada de tensiones con India. La propuesta fue difundida a través de un comunicado oficial publicado el viernes y compartido por medios locales e internacionales.
Trump desempeñó un papel clave en la prevención de una guerra a gran escala entre las dos potencias nucleares del sur de Asia, luego un feroz atentado terrorista en la región disputada de Kashmir, a lo que India respondió con una escalada militar que casi alcanza un punto crucial.
En respuesta a esa escalada, Pakistán lanzó la operación militar »Bunyan-um-Marsoos», definida como una acción »medida, precisa y defensiva», con el objetivo de restablecer la disuasión sin poner en riesgo a la población civil.
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Islamabad atribuyó la rápida desescalada al papel de Donald Trump y al secretario de Estado de los Estados Unidos,Marco Rubio, quienes facilitaron un acuerdo de alto el fuego el 10 de mayo, evitando una guerra abierta.
»Su previsión estratégica y su sobresaliente habilidad diplomática ayudaron a frenar la crisis y asegurar una tregua entre las dos naciones nucleares», expresó el comunicado.
Además, el gobierno pakistaní elogió la diplomacia pragmática de Trump y recordó sus ofrecimientos anteriores para mediar en el conflicto de Jammu y Kashmir, una disputa territorial que ha sido el centro de múltiples enfrentamientos entre ambos países desde hace décadas.
De acuerdo a Pakistán, sin la implementación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Kashmir, »la paz duradera en Asia del Sur seguirá siendo inalcanzable».
El comunicado también destacó que Trump propuso sustituir el lenguaje de guerra por comercio, y utilizó herramientas diplomáticas y económicas para presionar a ambas partes, ayudando así a reducir las tensiones.
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Sin embargo, desde India se rechazó públicamente la versión pakistaní. El ministro de Asuntos Exteriores indio, Vikram Misri, afirmó que el alto el fuego fue producto del diálogo entre los mandos militares de ambos países y no de una mediación de Estados Unidos.
A pesar de las declaraciones de Misri, lo cierto es que hasta la intervención del gobierno estadounidense, la situación se encaminaba a una guerra total entre ambas potencias.
»Durante la conversación telefónica con Trump, el primer ministro Modi le aclaró que no hubo ningún tipo de discusión sobre mediación ni sobre un acuerdo comercial entre India y Estados Unidos en ese contexto», explicó.
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La crisis actual fue detonada por un ataque el 22 de abril en Jammu y Kashmir, que causó la muerte de 26 personas, en su mayoría turistas. India culpó a Pakistán por el atentado, algo que Islamabad negó categóricamente.
En declaraciones recientes desde Morristown, Nueva Jersey, el propio Trump afirmó que debería haber recibido el Premio Nobel de la Paz »cuatro o cinco veces ya», mencionando no solo su papel en Asia del Sur, sino también en conflictos como Serbia-Kosovo, Ruanda y la República Democrática del Congo. »No me lo dan porque solo se lo dan a los progresistas», expresó de manera muy acertada.
Pakistán se convierte así en uno de los primeros países en presentar oficialmente la candidatura de Trump al Nobel de la Paz, destacando su rol como »verdadero pacificador» en una región marcada por profundas tensiones históricas.
El comunicado concluye expresando la esperanza de que las acciones de Trump sigan fomentando la estabilidad regional y global, en un contexto marcado además por las crisis en Gaza e Irán.